Es autóctono a mí
el reposo de la serpiente
y el tigre
el eco murmurante del mar
y la añoranza de las decadas perdidas
tengo deseos
encarnados
de caricias de almohada de la
infancia
y un fuego
corroyéndome
la espina
es mio el canto
del riacho y del carancho
el reptar de los cascarudos en los médanos
el vestir del algodón bien lavado
del jean áspero y barato
de la zapatilla rota
es mi cara lo que presento!!
es de mi saber que algo anda malo
en el paisano o la gurisa que declama con la cara
qee un rayo malo le parte el alma
y tambien ha sido de mi
cerrar mi puerta demasiado a menudo y
reservarme
en los dias de tormentas eléctricas
o en desapegos dalinianos
vuelta a la serpiente que no es mala porque
los dioses la han hecho así
verguenza del tigre que guarda la zarpa
tigre de mazapán
en la hoguera por brindar el tedio
estas manos que entrego a la muerte cargan el pecado
de la suavidad del que solo archiva entre el polvo
del que imagina fiestas y bebe solo
del que se extraña demasiado a menudo
por estar demasiado solo
se restrega la barba descuidado
soliloqueando sobre lo que traen en el vientre las
nubes de lluvia
Por eso te digo:
No temas
solo obedece y castiga
separa la cabeza del cuerpo y olvida:
dicen que era para no molestar
pero el que lo dice ya no existe:
ha declarado aquel glorioso y famélico plural
un agravio y un descaro!
Y así me retiro
solo
solo
solo tres veces te digo solo y en esta
estrecha caja de madera mi ultimo verbo es mi cara
blanca
objeta
estorbo de una sola palabra
de sacar con un solo dedo
facilmente
taco Ceniciento de una noche y
!Dios los bendiga!
y una mala mañana después
una sola breve y una sola
y se acabó!
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