martes, 11 de marzo de 2014

Cuerpo de obra (Dolor de canijo)




Saludemos con cariño
a los dias pasados de la energia natural
las jornadas diurnas y nocturnas
con placeres de sellada vida de interior
las aletas de este pez que soy
cansadas ahora por las incontables noches
de creaciòn y de zozobra inconmensurable
las palabras y las notas musicales
estas muletas rotas donde se apoyan para correr
mi cerebro mi corazon mi higado
metabolizadores huracanados amigos huyen
hacia una puerta de salida demasiado luminosa
adios vieja alfombra del color de la sangre donde
se apoyaba mi costado elèctrico y regordete
adios a las armas de las musicas susurradas por la musa
en la compania familiar de la noche de juventud

no sorprende que alegria no me ampare!
la boca se me haga a un lado por proferir siniestros!
se abra el mundo de mi lado, se separe este càncer 
de la buena vid a la que fui tìmido por miedo a ser herido!

aqui en este solar donde se levanta en el aire mi castillo paupèrrimo
azotado por la angustia, visitado por el metòdico vicio de la locura
aun me hiergo en una sola pieza dolorida
lamiendo sangre, equilibrio suntuoso sobre cintura rota
digo: me duele como quien consuela tambien a espectros
digo: me duele
e informo consecuentemente con la boca con la que he de parir
un salvoconducto misericorde hacia el otro lado de la vida
con mi campera de jean tiesa por un millòn de tormentas
en las que temblè pensando que mi cuerpo de obra bien
valia la pena quedarse tan quieto  

Tenès lo que querias, Fernando,
pero nadie te prometiò nunca que podrìas devolverlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario