Cuentos de Andersen

Algunas cosas que me pasan
mientras las cosas me pasen estan bien
deficiencia cardiaca embotagamiento mental
insuficiencia sexual brazo dormido
nervio cervical irritado uñas encarnadas
vision borrosa mareos vegija debil
frio en las piernas despues de salir de la ducha mientras
el cielo se pone de color rosa cuando cae la noche
se que hay muchos ahi afuera como yo
intentando
intentando
intentando
escribiendo poemas de amor al amor
escribiendo poemas porque estan solos o porque no
tienen nada mas con que divertirse
o porque irse de vacaciones de uno mismo de una manera
importante es muy caro
como suicidarte o meterte en las drogas o salir de las drogas
salir afuera a comprar veinte pesos de churrasco y manteca
para la polenta
sin plata para el queso
el amor siempre nos vino enmantecado
pero sin queso
la manteca bien nos la podriamos haber metido en el culo
     tambien se te rompen las medias en medio de la peor noche
se te escapa el dedo grodio y bienque le pintaria un smiley y le diria
yo tambien estoy solo dedo... vos que hacias por ahi abajo?
viento helado ululando en la muerte serena de la noche
entrando por los agujeros de la pared y las soldaduras carcomidas por
el oxido en los marcos de las ventanas
y las medias, sin algodon, sin nada sin tela sin media en la media
y cuando estabas solo pensabas que no podia haber una peor noche
y te encontraste magicamente no mas solo y por un momento es genial
y entonces te das cuenta que ahora son dos personas con las medias rotas
las bragas mohosas tiradas en el suelo
los calzoncillos rotos por donde se te escapan las bolas tristes
sentados en una mesa vacia
platos sucios en los bordes con pegotes de comidas pasadas
de antaño y podridas
bañados por una luz miserable de una lampara rota que lo
unge todo de una profunda y desnuda tristeza
como si el universo todo hasta su muerte se enjutara

algunas cosas estan buenas como un soplo de sol en la cara en un dia que los quiosocos aumentan
las Coca Colas chiquitas a ocho pesos
en un pais donde medio millon de desgraciados todavia no saben que hay cosas
peores que el sida y la inflacion
gente que no sabe de que hay una musica secreta en el corazon de cada infeliz
que desea peinarse el pelo con la mano enfrente del espejo
ajustandonos el cinturon pensando en esa cara que te puso tu novia cuando se
dio cuenta de que estabas fumando tres cartones mas de cigarrillos por mes
mientras te olvidabas de comprar los regalos de navidad

pensarias en caballos y en viejos cuentos de Andersen mientras te montabas
a esas golfas de las lineas calientes, fernando
y los poemas
al igual que las luces rotas y las medias rotas
se rompen en el jardin trasero de lo mas vergonzoso de la nuca
se restriegan contra tu costado como pequeños barcos en los amarres de los puertos 
susurrando levemente
vivos solo levemente
respirando y resoplando enfermos de todo mientras duerme el faldòn centenario 
de la noche
sè que mis vecinos me odian
sè que mis amigos me odian
sè que mi novia me odia
los colectivos y los trenes me odian
Mozart me odia
Glenn Branca y Charlie Parker me odian
y yo los odio a ellos de vuelta
porque las cosas son asì
y nada mas
odiamos como queremos morirnos
leve y lenta y venenosamente
para que cuando se den cuenta como nos fuimos de estan vida
nadie en realidad estè muy enojado
como para que nos traigan de vuelta
para darnos una
segunda oportunidad de hacerlo peor.