viernes, 25 de abril de 2014

EL PREMIO, LAS GLÀNDULAS




Oh efemerides de las chicas lozanas de gorditas nalgas simplonas
blondas cabelleras L'oreal Paris al viento de Palermo Hollywood
pasando como cruceros de plata a travez de las veredas aledañas al botànico
verdadero aguantadero de pussy, verdadero arca de la primera mañana de las vulvas
bien afeitadas, sin irritaciones, cuidadas, garchadas con delicadeza


Acaso saben ustedes, zorras perfumadas,  que sus pantalones sin agujeros en vuestros traseros
iluminan la oscuridad de mi existencia aun mejor que los
empàpes de Heno de Pravia sobre la entrepierna de mis jeans
allà a lo lejos en mis dias de juventud
Yo me recortaba parejo la fina pelusa de mi bigote inexistente

entre los mozaicos blancos del baño mirando mi cara y mi cara miràndo a
ese personaje que la miraba extrañado

Si, tenia todos mis dientes
blancos como perlas
perlados como la leche en mis manos
PAPAPÀ PAPAPÀ, un cacui cae en la calle dejando su
medio cerebro debajo de una loca y ciega y estùpida media luna,
si, lucìa yo entonces a piachere mi sonrisa sin arrugas
en el mismo lugar donde esta ahora
hecha de cuero y labios como el vientre de la longaniza
era divertido hostigar la alegria de perfectos extraños y extrañas
por los diversos regalitos que esperaba y que nunca vinieron, ni viveron, en mi;
y si no vivieron era porque estaban muertos como yo
 

Podrìan ellos desplazarse con tanta sinverguenza ahora veinticinco
lustros luz sin que se les cayera el angel del alma, maniatado por
la realidad de la negaciòn de erecciònes y mojaditas?
Ja! 

Ahora que el timer alcanza pico de quietud mientras el niño se mece en la cuna
mientras Chile revienta de locura y de este lado de la puerta del mundo
mis orejas ya no se hinchan goteando sangre y semen entre los murmullos de la gran cama de la noche?

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