EL VERDADERO CAMINO QUE QUERIAN SEGUIR LAS AMIGAS DE DAFNE

-Como¿¿¿
- Bueno, eso...
- Eso que? TENES UN BROTE ORTIVA?
- Que?
- Bueno que te colgás sin de decir nada diciendo boludeces.
- Pero de que me estas hablando.

Dafne miró a Zuñiga, turbada, turbada y PÉPTICA!
Se tiró un pedo. Un pedo fiero, de los ácidos, de los que voltean muñecas y muñecos.
Abrió muy grande los ojos psicóticos.

- Bueno, de eso que dijiste, que que no tenia feeling...
- Bueno si te dije, eso no se... tal vez estoy en lo cierto.
- Tal vez decís que estas en lo cierto porque no tenés "smack".
- Que "smack"?
- Eso, "smack". "SMACK".

Chasqueó los dedos.

- Que es eso.
- Esa parte que pega y que todo coordina cuando lo decía, pero a vos no te sale.
- Bueno pero vos me bardeaste. Tambien me bardeaste antes.
- No se, vos sabrás. Yo veo a todo el mundo por la calle y son todos putos, se re nota.
- Yo no soy puto. Lo que si soy es muy PUTA. Pelos no tengo.
- Vos sos medio puto. Te crecen, te crecennn...

Aferrola del bracete.

- Vos tenes una condicion psiquiátrica.
- No se... no se...
- Bueno pero a que viene todo esto??
- No se, tengo una laguna mental.
- Si, yo tambien. Bueno laguneémos.
- Lagu... QUE?!?
- Que sobrevolemos cualquier cosa que sea pensamiento concreto sin más.
- Dale.

Dafne y Zuñiga juntan sus antenitas de vinil y se entregan a una laboriosa pasión orfebre de conectar sus discos rigidos para evitar ponerse los huevos al plato.

- ZAAMM BOOOM BBAAANNNG!!!
- ESTO ES RE LOCO!!!
- ZIII ZIII, CONECTEMOZZZZ...!!!

Hacen CUICHI CUICHI CUIIIISSSNNG  y tambien hacen ZWWIINBGGEENGUIJNNGGSSSZZZ!!!
ESTAN LOCAS, LOCASH!
De pronto paran, se hierguen, se lloran, se relamen en la fruicion del acto y después se averguenzan. EL MUNDO SE HA TORNADO VIOLETA, DEL COLOR DE LAS MUJERES AFECTADAS.

- Deberiamos continuar con esto?
- Acaso estamos chaladas???
- Tenemos una condición?
- Deberiamos comprar un arma, dejar los alimentos que son perniciosos para nuestra dieta?
- PREGUNTEMOSLE A NUESTRAS PELUCAS...

Dafne y Zuñiga se sacan sus pelucas de color morado y las acarician y las acarician y las acarician... nadie en la historia de la humanidad ha acariciado de esta manera, rugen los leones en las planicies de la Savannah, lloran los cerdos, gimotean las PALMAS DE TODOS....!

- Acaso nos volvimos locas?
- Yo necesito un depilador masculino....
- O una trola con un clitoris sobredimensionado---!
- NO HAY PIEDAD PARA LAS AMANTASSS!!!
- Enviemnos e-mails, mandemos MPs, sacrifiquemos al hijo del Cordero que ha llegado hoy por Federal Express....
- Acaso cabría en la palma de nuestras manos para que lo hagamos mierda???
- Si no lo intentamos seria el fin de nuestros dias, el fin de nuestras pelucas, el fin del regocijo de LA VORAGINEEEE!!!
- NOOOOOOOO!!!!
- NOOOOOOOO!!!!

Las dos sacaron sendos pequeños objetos microscópicos y de color carne de sus carteras, eran unas bolitas de pelos de caracter muy particular: se movian apenas perceptiblemente y estos objetitos gesticulaban con pequeñas boquitas de carmín y vociferaban en sus pequeñas vocecitas:

- CANTEMOS A LOS CAMINOS MISTERIORRSOSS DEL SEÑOR!!!
- ORRRSOSSSS, ORRRSOSSS URRRZZOOOSSS, ALAVENONONS, ALNGALSALANGHS!
- LA PIEDAD ES EL CAMINO DIVINO, PUTICAS DEL ORTO...
- ESO, PUTAS DE MIERDA, FRÍGIDAS LAMECULOS EXTRAÑAS DE UNA CONCHA...

Dafne susurró consternada:

- ME DIJO PUTA.
- CREO QUE DE HECHO NOS LLAMO PUTAS A LAS DOS.
- Inadmisible. No podemos ser mas que una sola, todas nosotras, nosotras dos.
- O somos tres?
- Hay espacio para comentario aparte más que este último?
- Pendejo del orto.

Zuñiga levantó un brazo vengador y lo aplastó al pequeño Redentor de un sopapo en la palma de su amiga Dafne, que lloriqueó un gritito mojado. En su palma solo quedó una pequeña marca de sangre caliente y fresca que ella secó con una pristina hoja de excelente papel tissue. Dafne profirió una sonrisilla histérica con un sonido gorjeante y, orinándose encima, proclamó:

- CREO QUE ACABÉ!
- Y creo que yo lo ACABÉ A EL!!!!
- TWITTIEMOSLO!!!!
- No, guardemoslo como si fiera un tesoro, nos tildarian de frivolas.
- Nos crucificarian como a ellos.
- Todavia queda el tuyo, Zuñiga! Yo lo liquidaré!
- No, tratemos de hablar con el Hijo de Dios, estos pequeñines cuestan una fortuna!
- OK...

Zuñiga se encorvó sobre su pequeño Mesías de diseño.

- No queremos hacerte daño, pero de todas formas aplicariamos la ley si fuera necesario. Nosotras te invocamos y vos obedecés. ok?
- Mátense, prostitutas reventadas, me chupa un huevo...
- Deberías saber que vos sos el Mesías, Esteban...
- No soy Esteban, soy Marcos Miguel, Y SOY ARQUITECTO Y YO ME QUIERO IR DE ACÁ!!!
- PINGA QUE TE VAS, DE VUELTA AL BOLSO, TRUHAN!!!

Zuñiga se acomodó un pelo de la nariz y metió de vuelta al pequeño Jesus de Nazareth en su bolso.

- Es una lastima, se parecia a Pablo Echarri.
- Está en garantía.
- Nos mirarían raro, como peces con pelo...
- Somos procedentes?
- Acaso la culpa a través de la historia del hombre es una estratagema de mierda? Debería matarte?
- Yo no quiero incordiarte por eso te digo que podrias intentarlo, amiga Dafne!
- Gracias, amiga...!

Sacóle la perra un Magnum 44 del bolso y asi nomás le voló la cara a su mejor amiga. Grandes chorros de sangre sobre EL MUNDO BLANCO.... PSSSHHHH PSSHHHHH borbotones y clamores, corridas y espantajos! LA COMUNIDAD TURBADA, RECAMBIO MASIVO DE TAMPONES!!!
Vió como su mejor amiga de pronto tenia dos cabezas: la cabeza de siempre y la cabecera de playa. Se turbó. Dios la habia abandonado. Reprimió violentamente con la fuerza de un animal salvaje esa emocion que sentía en ese momento, por vez primera.

Se pegó un tiro a ella misma. Y todo terminó.

En el bolso, el pequeño Cristo Pablo Echarri, se masturbaba copiosamente hasta que le devolvieran su libertad, o su estatura, o la estatura real de lo que Él consideraba real, de tanto escuchar a esas viejas perras acabar con sus Biblias entre las piernas blandorras, del otro lado del cuero de la cartera. Espasmos, la carretera y la manera!
Entonces se echó a dormir dentro de todo ese cuero negro, y en su sueño , una mujer sin peluca ni tetas de plástico sacaba una pistola de agua y se la disparaba en la cara, con una sonrisa que le provocaria mil y una erecciones desde detrás del telón de todas las obras de teatro ridiculas de todo el tiempo de todos los hombres; se quitaba la crema facial y se iba a dormir con Él, mientras el Sindicato de Cabras de Turkmenistán saltaban cantando el Himno Nacional, atiborradas de granos de café en un mundo con todas las reglas bien derechitas, me cago en Dios.
Pensó, algun día, cuando recupere mis maneras habituales, voy a escribir un libro.
O eso me dijo Él.
Y aquí está, carajos, alguien tenia que hacerlo.