Ecto

Me subyugan demasiado
las viejas historias de familias
de entierros fantasmas
de trenes peronistas hacia sierras
de viejas estancias alemanas
hay demasiados fantasmas como
para no darles bola a todos
esos seres ectoplasmaticos
vistos y vistos otra vez
en la esquina de mi living room
en el living de mi vieja
Juan Wagner pasea con
su chambergo negro
de vez en cuando
cuando cae la noche
y todo està muy quieto
cuando duerme hasta la luna
y los insectos paran de roer
la tierra
para que pase el que
se ha ido
para que vuelva el que
vuelve a querer estar

me subyuga el hecho de
una segunda vuelta
una revancha de miedo
me subyuga que ya no
voy a cementerios
a visitar a nadie
estoy haciendo las valijas
a Mar Chiquita
al Gran Hotel Viena
a General Galarza con sus
generadores de electricidad
estrictamente apagados a las ocho
para que duerman con
los ojos bien abiertos
en una completa oscuridad
escuchando
los niños blancos
escuchando
el pombero viniendo
rio abajo
sibilando a travez de la piara convulsa
con sus manos largas y temblorosas
lamiendo la ventana de
los pròdigos puros
insomnes
hijos de Alemania