Adios, hasta luego, gracias. Triste noticia. Murio Juan Carlos Calabrò. Me hacia recagar de risa con Calabromas. Anìbal, Borromeo en la zapateria... uno fue inocente y ahora carga la culpa de esa virginidad mientras las mortalidades, varias, en capa, en signos, se acercan a uno. Yo no sè. Mala noticia esta mañana. recuierdos de estar en la cama y reirme con una televisiòn inocente, sana, para todos, sin conchas y penes, sin exabruptos, sin terapia de shock. Y ahi estaba J.C. calabrò. Donde se lo necesitaba, Mingo, Porcel, Olmedo, Espalter... me debo de olvidar muchos mas de estas eras, fueron buenso tiempos. Extraña vida, extraño rollo. Cuando empieza uno a darse cuenta de que todo se va? Por que es demasiado tarde cuando llega ese demasiado tarde? Yo debo saber.
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