viernes, 1 de noviembre de 2013

Demasiado afiladisimo esta noche



Hendrix en los parlantes
y son las dos
y me hace mal

anuncian tormentas fuertes

todo un año creando un rio dulce
y con ese rio hacia abajo
se iran mis sueños

en esa agüita encontraras tres lagrimitas

una por mi
otra por mi mujer
y otra por el hijo que nunca tendrè
gateando en el living

lloverà esta noche

lamiendo la madrugada lenta mientras
media ciudad trata de dormir
y la otra mitad trata de desencasquillar la pistola

y ese sueño chaval de blues corriendo por mis venas

harà un alto en el cenagal donde
dejè pasar la tarde con los ojos
cerrados

pensando en un amor


y despues saltar hacia adelante

que ahora es atràs 
los hospitales que me acogieron
y los monstruos que me cojieron
que tuvieròn el tupè de hacerme esperar
aterrado dentro de mi esqueleto a que dieran las seis
en un alba descarnado
sin pan y sin mucho
mas

las horas descriptas se haràn

paìs
ahi donde cae esta mecanografìa mustia
donde hago de mi corazon
un basural

no va a llover esta noche


va a llorar SANGRE el cielo


la mitad desencasquillarà la pistola

y la mirarà con terror o cariño

por que hicimos esto?

acaso algun diablo enviò este cancer 
a torturarnos ausentandonos del cielo
castigarnos por saborear la alegria?

Y decir que yo aqui estoy con todos aquellos

que exijen que se les devuelva el derecho a replica
en la vida
o en la muerte
en la obligatoriedad del descargo
de todos
o en mi vida aqui tan sola 
en el capricho de mis manos 

hace falta todavia esta almohada

tan apenada?
quien puso estas arrugas en mi camisa
que treparon por mis hombros
por mis homoplatos y oxidaron
la sonrisa que solo me devolvian los perros
cuando no habia sonrisa alguna de mis padres?

fajàndome tiernamente porque conmigo en el medio

no podian ser enteramente de ellos mismos

cabrà el cielo en la mano 

gimiendo como un cachorrillo trèmulo
en diluvio de agua y sangre y lo apuntarè
exactamente 
al medio de mi cabeza
y tal vez ni me importe si se dirà 
que hice lo mejor que pude
en mis tardes de ensueño

mendigando humanidad en los zocalos animales de este mundo

que me amò a mi en la muerte mas de lo que me
amò a mì enseñandole esta vida aqui ofrecida

tapando con betùn prestado

los agujeros en mis retorcidos zapatos de escuela.







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