Escriba de lo que sepa
no de rubias dèbiles echando espuma por la boca
en tiernas limousines de marfil
dedìquese a extrañar el campo
a seguir buscando el chupete
en ex-cuartuchos de pensiòn con la obligatoria cucaracha subiendo
por la pared lateral de la pequeña recepciòn
odie los martes
replièguese los viernes
marchìtese los sabados
y haga acto de contricciòn los domingos
los lunes disfrute de la actividad de la madrugada y de la mañana
espere que abran los mercados y vaya y còmprese
leche chocolatada
y una lata de jurel en aceite y agua
y mire al cielo preguntàndose que es eso
de persignarse
cale hondo la nada por la noche
tome una ducha
escriba en el programa de computadora una base electronica
para poner guitarras podridas y gimoteras en la supercarretera
de los bits locos
guardelo en copia doble
arremanguese bien cuando se lave
recuerde que a Garcìa Màrquez se le fue la mente al final y por
mucho menos
no tenga compasiòn rastrera por los hombres de buenaventura
al contrario
màtelos en su mente tan pronto como pueda
y descàrtelos
el asidero està a veces en la locura
pero eso lo saben los nuevos poetas
limpios
manicurados
Instagramados
en sus tiernos y seguros viajes de placer
adentro de casa se quedan las escorias y los subnormales
los llanos locos
los simplemente resistibles
los dejados y los sucios y los degenerados
drogadictos y enfermitos
que nunca leyeron
Menos que cero.
cuando suenan esas campanas
en las iglesias que no existen en lo alto
de las colinas de mi barrio
que tampoco existen
con esas mùsicas que me hago
esas si
son las unicas que existen
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