El sabor del mate me es un poco agreste estos dias, la energia psicotronica propia y la de todo el mundo reviradisimo y angustiado me pone, por decirlo de alguna manera, nerviosisho. No quiero ver a la gente alrdedor mio pasandola mal. Ojala cuenten conmigo para lo que sea. Guita no tengo, pero adoraria volver ahi y darle un abrazo a todos como si de congregación religiosa se tratara. Uno, a su manera, al igual que todos, queremos un dios bueno que no complique, no pida sangre ni guita a cambio de unas palabras de comfort. Por eso me lo digo a mi y te lo digo a vos, tratemos de ser buenos el uno con el otro. Yo tengo mi cuerpo y mi conciencia y mi razonar dudoso para servirles en lo que sea. Hace 46 años que vengo de divorcio en divorcio, y a mi el blues no me lo tienen que explicar... en especial cuando el divorcio esta en contra de uno, porque uno está en contra de uno mismo.
Ja! Y todo esto vino porque el mate me sabe amargo... cargo días extraños, y me resiento y voy a la cama asustado y me levanto al dia siguiente sin persignarme y pensando en ella, y en él, y mis huesos que vienen de otros huesos centenarios, polvorientos, que chirrian y gimen, de tiempos de hambre y días sin techo ni cama para dormir.
Quiero volver a verles otra vez, con tanta fuerza, con este anhelo bestial. Pero todo a su tiempo.
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