OTRA VEZ LOS INVISIBLES

No te puedo ver
amigo invisible
no me podes ver
yo invisible
nos cruzamos por las calles tajeadas
escondidos en ropas extrañas
caminamos rápido
de vuelta al agujero
que nos pare dia a dia
nos sepultamos en vida
en un fraternal silencio
no te toco no me toques
no toquen esto que cobijo
tus manos famélicas
desean un amor
un amigo
una amiga
un plato caliente compartido
una salida desesperada a
el épico terror que nos consume
desearíamos una soga de conexión
al abrazo redentor que nunca llega
al sueño del alba del amor
un nexo gemelo
una palmada en el hombro
te cruzo por la calle
tus ojos se posan en los mios
por un milisegundo
y sé quien sos
se que es lo que estas pensando
a donde vas y a donde no vas
veo tu ropa
tus zapatillas
y tus zapatos
y tu cara embotada y tensa como una máscara
y tus manos aferradas a un bolso
detras de tus gafas
de tu pelo triste tapandote la cara
llueve
o hace sol
te veo dar vueltas por la plaza
alrededor del lago
descansando sobre los escudos
de las provincias debajo del obelisco
con tu pata de palo y tu prótesis
sosteniendo una caja de carton
que dice:
NECESITO UNA AYUDA
PARA NO TENER QUE SALIR A ROBAR
te veo en el subte
aferrado a chaqueta
flaco como un toro flaco
rumiando las palabras del amor con los labios
cansado
en un traje que cae mal por tus hombros
hastiado hasta la locura
musitando
musitando...
y no hay nadie ahi
no hay un celular o companía en el flanco
solo una triste caminata motorizada
por los túneles de Buenos Aires
entre el humo y las ratas
y te lleva a ningún lado esa maldita cosa
y te veo vagando por el invierno capitalino
con una campera delgada color crema
por que habrías de ser tan enjuta si te he
pensado tantos años hace ya?
detrás de tus anteojos de culo de botella sucios
el pelo graso
la cara sin maquillaje
delgada como un hambre
con tu carpetita oficio llenas de dibujos
a lápiz
solo cinco pesos, me dijiste, solo
cinco pesos y yo te dije: nó
y vos tenias que comer y yo tenia que comer y
todo el mundo tiene que comer
y hace frio
y veo a mi vieja, otra invisible
en su habitación nueva
con esa lámpara en el techo de bajo wattaje
regordeta y sola y bañada de recuerdos y de
ingratitudes y con la lengua siempre afilada
y nadie quiere, y nadie quiere y nadie entiende
y no hay perdon, no hay remordimiento y no hay
perdón
BORN TO DIE
mientras caen las gotas gordas de esta tormenta
de primavera en el techo de chapa, otra vez
misma historia y mismo esqueleto
mismo buey mismo fino cuchillo
y todas estas cosas que yo veo
que veo a los invisibles desembarazarse de toda
la carne de la vida precisamente para vivir
yo los veo con estas puntas de dedos que tengo por manos muertas
y la electricidad de este moño labial los nombra como
si fueran fantasmas
me digo: no los nombres mas
te van a chupar el seso
pero ya lo han hecho... es tarde,
me han cargado la pila con estas luces mortecinas
y al igual que vos todo este trajín ha dejado la sombra de
un hombre y la sombra triste de una mujer
aquí, aquí en mi cráneo loco y no puedo parar
no puedo parar lo irresistible
no te puedo ver, amiga, amigo,
invisibles, deformes hastiados cansados apaleados
humillados y degradados por el sistema romántico
partidos al medio por el desamor y la mala suerte
y tu padre no te queria y tu madre te pegaba
y tus hermanos te tiraban tomates en la cara porque tenias un pie deforme
y ahora viven en Burzaco lustrando el Ford Ka todos los domingos
en chancletas en la calle y no te llaman
y tu novia te cagó con el profesor de pilates y tu novio
tiene cáncer testicular y se hizo testigo de Jehová
o no hay novio ni novia ni polola ni nada
y pápá murió en un accidente de trafico en la avenida Saenz
en la madrugada de navidad de 1985 calcinado
con todos los regalos adentro
o mamá se fue con otro tipo y un día le empezaste a decir
papá a ese otro tipo y "papá" te tocaba ahí por abajo de las sábanas
cuando mamá dormía
o quisiste comer un huevo
duro el huevo estaba verde y tu perro te miró y te mordió
y te llevaron a una institución mental
y tu gato escupe pús por la pija
o ni gato, ni perro, ni un amor, ni nada
ni una papelera donde meter la cabeza para que te arreglen
la porquería del vacío que quisieras sacar con un gato y
un buen par de cuchillos Ginzu
vos, yo, el ella, nadie nos ve, por que nadie nos ve?
hartos de todo por el
palo en el lomo y la sangría de la maravilla
para ecitar que huelan la buena carne y nos faenen el corazón
yo estoy aquí, vos estas aquí ahora, tenemos un corazón!
a quien le importa me digo yo, y me contraigo como una sanguijuela
y me duele un poquito, no mucho, no tanto como pudiera confesar
a quien debe importarle?, si estamos hechos de olvido y de pastillas
de cansancio y de fotos amarillas
de trabajo forzado y de piedra incrustada con Gilette en el camino
debo pero no puedo!
tengo que seguir caminando
tengo que olvidar
tengo que beber y deshacerme de toda
la carne de la vida tambien, sacarmela de los huesos para que no vengan
para sobrevivir esta ciudad y el sonido en mi cabeza
y las palabras y los hechos y la tragedia y la miseria
y de mis hermanos
y de mi casa
y de mi cigarrillo
y de esos ojos maravillosos que por un segundo
han chispeado con toda la humanidad del mundo
antes de ser cerrados y abiertos de vuelta
hacia la dureza mojada
de la calle roñosa
y yo te llevo como un escudo de amor en el pecho
mira, aquí donde se lo están llevando todo
y no tiene nombre
y no puedo, no puedo parar lo que va a venir.