El Principe

Debiò ser un prìncipe, debiò ser cuidado. Como no conectaba tomaba botellitas de vidrio
de coca cola y se homenajeaba postumamente con un mantecol
todos los miercoles y viernes
Consecuentemente enviaba fogonazos y alertas
bravas exclamaciones
estaba enojado y se enojaba con
los enojados y con los que no estaban
enojados
Debiò ser un prìncipe, tenia manos para curar a locos
podia hacer ver a los ciegos, creia en caminar con los que ya no pueden darse el lujo
de estar azorados
No pudo caber nunca en las riendas dòciles de nadie
la iluminacion sospechada de ser mensurada es el camino
mas solitario
Ya nadie quiere hablar de èl
para eso existen los asilos
las perreras
y el cielo
que lo guardarà en su seno
                       a su debido tiempo

Esto me dijo a mi cantando como grita el mar

                 "A donde se fueron todos cuando ya nos estamos llendo?
                            Vengan, vuelvan!"