lunes, 20 de octubre de 2014

Nunca preguntar por qué

No salgo mucho y duermo poco
como mal y mucho
cojo mal y poco
duermo mucho y mal
el mal me duele mucho y el bien
me hace mal

yo se que hay algo negro dentro de mi
que duerme al lado del corazon
de oro que tuvo a este
niño en sus brazos

me repele, me avienta golpes
me entristece las partes buenas
me hace un soldado de la locura

apenas  tengo demasiado tiempo para
respirar

cuando salgo afuera a por un sanguche
el sol y el cielo se me antojan de otros
pienso en cadaveres
y en flores y el pasto creciendo
a travez del concreto
pienso en suburbios y el oceano
marron

no pienso mucho pero pienso en tangos que escucho 
a la mañana
cuando tengo la energia osada de pensarme un exiliado
y a veces lloro
caen estas lagrimas pesadas y la cara se crispa
evito entonces los espejos
las iglesias
las demostraciones de afecto excesivas
los bancos y las estafetas de correo
los buscadores de internet
los desodorantes a bolilla
y las medias

trato de mantenerme ligero
y creocque todavia estoy cabál como para decir que
no lo logro
no lo logro...

soy como el acero moldeado
no tengo un peso fisico especifico significante
solo ocupo un lugar asignado por
las manos de algun loco
en mi clave y mortal
forma grave

algun dia me enteraré de que en la Tierra
habia una mision secreta mas alla de ser ser amado
por la mayor cantidad de gente posible

busco ser estúpido:
asi se consiguen mejores mujeres
y mejores trabajos

nunca pierdo la esperanza,
trato

vegano
porrero
lobotomizado a los nueve años
militante de izquierda
trabajar  para los amos
y decir que no trabajo para los putos amos de
todo:
que debí ser feliz y nunca
preguntar por qué
dos veces
para que me maten dos o nueve 
millones de veces

eso es lo mio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario