No vengan a mi funeral
no los necesito
estoy haciendo los tramites para cuando
ese algo pétreo
me separe de la faz de la tierra
y me mande a nuevos lugares donde tendré que
negociar algo mas que sangre y carne
no creo que vague por las estrellas
y cuando tenga otra vez en la cara
a esos que tanto temí cuando lanzaban sus manos contra mi cuerpo
tambien voy a tener miedo
no me traigas flores
ni cuerdas de guitarra o acaricies mi frente fria
como quien subsana lo que no se puede hacer nunca al final
con un fiel perro
hice mis cosas - algunas buenas - otras malas -
apenas tube boca
vi mi pelo caer en mi falda y mis dedos correr
en el diapasón de una guitarra o un piano
pude hacerlo porque creí que las cosas iniestas podrian subyugar
vuestras carnes reblandecidas por la alegría
y donde toqué
eso se apartó
mi padre y mi madre
mi hijo y mi mascota
la misericordia de las hojas amarillas por el azote cobrizo de las heladas
el niño de seda con la nariz aplastada contra la pared calafateada
mi estadía breve
mi descanso eterno esperando trenes
me pegaron en la cabeza hasta que no quedó nada que fuera mío
y ahora me llevo sus nombres, intrascendentes como un respirar de conejo
ligeros como la danza de un electrón en la mollera
me los llevo conmigo hacia mi capa de rescoldo
porque ustedes tambien estan muertos
hace rato largo.
no los necesito
estoy haciendo los tramites para cuando
ese algo pétreo
me separe de la faz de la tierra
y me mande a nuevos lugares donde tendré que
negociar algo mas que sangre y carne
no creo que vague por las estrellas
y cuando tenga otra vez en la cara
a esos que tanto temí cuando lanzaban sus manos contra mi cuerpo
tambien voy a tener miedo
no me traigas flores
ni cuerdas de guitarra o acaricies mi frente fria
como quien subsana lo que no se puede hacer nunca al final
con un fiel perro
hice mis cosas - algunas buenas - otras malas -
apenas tube boca
vi mi pelo caer en mi falda y mis dedos correr
en el diapasón de una guitarra o un piano
pude hacerlo porque creí que las cosas iniestas podrian subyugar
vuestras carnes reblandecidas por la alegría
y donde toqué
eso se apartó
mi padre y mi madre
mi hijo y mi mascota
la misericordia de las hojas amarillas por el azote cobrizo de las heladas
el niño de seda con la nariz aplastada contra la pared calafateada
mi estadía breve
mi descanso eterno esperando trenes
me pegaron en la cabeza hasta que no quedó nada que fuera mío
y ahora me llevo sus nombres, intrascendentes como un respirar de conejo
ligeros como la danza de un electrón en la mollera
me los llevo conmigo hacia mi capa de rescoldo
porque ustedes tambien estan muertos
hace rato largo.
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