El problema
no es que el vendedor tenga
los dientes para afuera como
en una caricatura grotesca
rodete morral armoniquista
flautas de Pan
el problema no es que el muchacho
tenga que tener un problema mental
irreversible y quiera hablar conmigo
durante hora y media hasta el fin del tiempo
el problema no es que el padre odie a
la hija igual que odiaba a su perra
el problema no es la germinacion
de la idea del suicidio
el problema no es el polvo siendo
un gran desierto donde mis
cucarachas juegan volley de playa
cuando el señor apaga la luz
el problema es el problema de
cuando uno recibe palo por las
maldades que uno exitosamente se ha
hecho exento de procurar
millones de buenos han de claudicar
ante mensurables fuerzas espureas
aparentemente inflexibles trabajando
entre lujos y placer mientras derribo
flores en mi derecho a la tumba
el poema es el problema y el
poema nunca habia sido un problema
solo dios sabe que los resarce
tocar las bocinas
malditos los caminos misteriosos de dios
condenados mis calzoncillos
y las monedas sueltas muertas
inutiles mil estrellas de la mañana
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